La industria avícola de América del Sur se enfrenta a un importante desafío de micotoxinas, los cuales son metabolitos secundarios nocivos producidos por mohos, que comprometen la salud de las aves de corral, la productividad y la estabilidad económica. Las diversas condiciones climáticas de la región, exacerbadas por el cambio climático, promueven el aumento en la prevalencia de micotoxinas claves como aflatoxinas, fumonisinas, ocratoxinas, zearalenona, tricotecenos, entre otras, que son perjudiciales para la salud avícola y pública.
La inflamación es un proceso vital del sistema inmune que conlleva un importante costo metabólico en los seres vivos. La inflamación, ya sea por agentes infecciosos u otros estímulos, activa diversas células del sistema inmune, como macrófagos y neutrófilos (heterófilos en las aves), que consumen una gran cantidad de energía. Esta mayor demanda de energía se refleja en la producción de mediadores inflamatorios y en la reprogramación metabólica de las células afectadas.
El Metapneumovirus (MPVA) es un patógeno ampliamente distribuido en granjas comerciales avícolas del mundo, afectando inclusive otras especies de aves de vida silvestre. La enfermedad respiratoria resultante de la infección lleva a pérdidas económicas significativas.